En la FFM Isadora Duncan empezamos el año trabajando en beneficio de las mujeres, en especial de aquellas supervivientes a situaciones de violencia. Con esta intención nos sumamos a participar en la propuesta autonómica de la Asociación de Sexología Dialogasex, la cual desarrollará en distintas entidades de Castilla y León un programa denominado “Prevención de violencias sexuales en mujeres en situación de especial vulnerabilidad a través de la formación e intervención sexológica”.
La sexualidad es aún en la actualidad un estigma y un tabú, algo de lo que no se habla o al menos en lo que no se profundiza, nos avergüenza y preferimos mantenerlo dentro de la esfera privada. Es habitual que al hablar de sexualidad lo primero en lo que pensemos sea en el sexo, en las relaciones físicas o en la reproducción, pero esto es solo una pequeña parte, la sexualidad también contempla la erótica, el placer, la sensualidad, el consentimiento, el autoconocimiento de los genitales, el orgasmo, la masturbación, etc.
Identificar cuáles son los tipos de agresiones sexuales es importante tanto para las mujeres que las han sufrido previamente y que podrán reconstruir y sanar desde la conciencia plena de la situación, como para las que afortunadamente aún no han tenido esta experiencia, que podrán detectar cuando lo que les está ocurriendo a ellas o a otra mujer es una agresión e intentar, en la medida de lo posible, actuar y evitarla.
Con esta intención participamos en la formación impartida en León el 19 de enero por la Sexóloga Lara Herrero, de la Asociación Dialogasex, con la cual colaboramos cediendo el espacio para la realización de un taller de cuatro horas al que asistieron conjuntamente usuarias del Centro de protección y prevención a mujer inmigrante y víctima de violencia de género de nuestra FFM Isadora Duncan y usuarias del Programa Lua de la Asociación ACCLAD.
Los principales objetivos que se pretendía alcanzar con la formación fueron:
- Identificar las violencias sexuales y actuar en caso de ser testigo o haber sufrido una violencia sexual
- Fomentar una visión positiva de la erótica y la capacidad de decisión sobre la misma
- Empoderar a las mujeres desde la comprensión de su propia biografía sexual
- Favorecer la autoestima sexual y el autocuidado personal físico y psicológico
- Evitar sentimientos de indefensión aprendida, vergüenza o culpa ante la posible vivencia de violencias sexuales.
Para lograrlos se trabaja el concepto de sexualidad, el conocimiento del cuerpo y los genitales de la mujer, los roles y estereotipos de género que tanto nos condicionan en las relaciones románticas y sexuales, la diferencia entre complacer y sentir placer estableciendo este como un derecho sexual que tenemos que reivindicar las mujeres, la salud sexual femenina, el empoderamiento y la autoestima erótica, la importancia del consentimiento el deseo y el consenso en las relaciones sexuales, la identificación de la violencia sexual entendida como violencia de género y algunas pautas de actuación ante la misma.
Tras la formación contrastamos la valoración de las profesionales con la de las usuarias y ambas fueron muy positivas, se destaca lo nutritiva que fue la diversidad de perfiles y nacionalidades que asistieron y la participación de las mujeres dentro de la formación, que generó un espacio de confianza en el que compartir y aprender.
